jueves, agosto 18, 2005

maitreya


Craig Smith salvó el planeta, esa es la frase con la que abre el libreto interior de la reedición de Apache e Inca, los dos discos que él (balo el alias de Satya Sai Maitreya Kali) publicó en la década de los sesentas. Menudo drogadicto desahuciado era este Maitreya Kali. Es duro ser drogadicto, pero si se es además un romántico entonces la cosa ya valió madres. Leyenda olvidada de la psicodelia de la costa oeste, Maitreya, entregó al mundo dos discos que valen su peso en caviar noruego, hablamos de los imprescindibles Apache e Inca, dos pedazos de orfebrería psicodélica que tomaron forma en los frecuentes viajes de peyote del autor. La mayoría del material de estos discos fue compuesto durante los constantes viajes de Maitreya a Latinoamérica: deambulo con su poncho de hippie por México, Ecuador, Argentina y Perú. Kali solía buscar la inspiración principalmente en el L.S.D., en el budismo y en doctrinas hindúes religiosas, como todos los hippies supongo que no sabía ni un pito de lo que estaba hablando. Las lenguas dicen que el cantautor con nombre de anticristo se recluía durante el verano del amor en el profundo desierto de Mojave, ayunando y componiendo canciones, si, era un puto hippie de mierda, pero era de esos jipitecas entrañables como Arthur Lee. Su primer álbum “Apache” contiene 12 cortes escalofriantes de dry-flower power: Folk cósmico y nocturno, abre “Ice & Snow” que pone la piel de gallina, acertada, delicada y primitiva, a mi suena cómo una fogata en la que Nick Drake toca la guitarra y Carl Wilson canta, Le sigue la diabólica “Black Swan” una oda a Satanás disfrazada de nana infantil. Desde ahí el material se divide entre ese folk celestial que tan bien le sale y el rock psicodélico puro y duro, tipo Love de Four Sail. (“Salesman” es un puta pachequez que merece un lugar en la historia de las canciones absurdas). Después de haber escuchado Apache cientos de veces en mi vida sospecho que Maitrey Kali se sabía tres o cuatro acordes de guitarra, pero ¡qué talento para las canciones!

Inca es su segundo álbum, es mucho más electrificado que Apache, tiene diez canciones con un sonido mucho más San Francisco, tiene influencia de The Beatles pero la tiene en la misma medida que la tiene de Moby Grape o Captain Beefheart, un disco alocado y de buena vibra. De aquí sobresale “knot the freize” otro trip de 12 minutos de duración, un fantástico pasaje veraniego tan especial que ya ni siquiera quisiera compararlo con alguna otra cosa para describirlo. Le sigue “Jesús Owns" ese tipo de canciones parecen versiones rupestres de canciones de The Free Design. “Cherryl” es Folk pero ¡con cintas! Si, muy adelantado. “Country Girl” es puro Van Dyke Parks de Song Cycle. Si, casi todas las canciones folk tienen los mismos acordes, extraño. La única mala cosa del asunto es que “King” la pieza que cierra el disco sólo dura 8 segundos, quiero suponer que ha sido todo lo que se ha podido rescatar de los master, algo bonito se alcanza a escuchar “well if i´m the king, you know, you´re mi queen forever…..” Ahhh.. que romántico ese Maitreya… pinche drogo. Por favor si se hacen con una copia orginal del disco no pierdan la oportunidad de leer las anotaciones del propio Maitreya, menudos incoherencias jipitecas con constantes aluciones al L.S.D., la marihuana, los hippies, los beatles, mamadas hindúes y la espiritualidad, pura risa loca que no hay que pasar por alto. En los agradecimientos aparecen nombres ilustres. Neil Young, Yoko Ono, Larry Murray, Glen Campbell, the beatles, Monkees, Frank Zappa y Mike Love entre otros… menudo mamarracho. Hombre loco, música celestial y dispersa.

5 comentarios:

Malcriada dijo...

Comunicate..te extraño

L*

Anónimo dijo...

que perra.

Kituchis dijo...

Sí, la vida es bien perra...

chinchilla dijo...

Aunque las avalanchas Apache eran mejores naves.
Psicoviajes ultra twisted justo después de un post sobre el wife pop de las Pipettes. Ni el milusos era tan ecléctico :)

Anónimo dijo...

chaval que mal escribes. Haz un curso por correspondencia en composición y lexico